Matagalpa, uno de los departamentos cafetaleros del norte de Nicaragua, también es conocida como Perla del Septentrión por sus características naturales: húmeda y verde. Sin embargo, una excesiva presión demográfica y el uso intensivo de leña por parte de sus habitantes está cambiando un paisaje que se encuentra sumido en un progresivo despale, como se conoce allí al fenómeno de la deforestación, habiéndose reducido la superficie de masa boscosa en un 31% desde 1990, según datos del Banco Mundial. Las consecuencias de este proceso sobre la biodiversidad y la fijación de dióxido de carbono son evidentes, así como la erosión del suelo y el riesgo de corrimientos de tierra en épocas de lluvia por la pérdida de masa vegetal. Uno de los factores que inciden en este alarmante despale, el uso de leña como combustible para cocinar, resulta además muy nocivo para la salud de las mujeres y de los más pequeños, que suelen pasar gran parte del día junto a sus madres en las cocinas.